La instalación del retén en forma incorrecta es una de las principales causas de pérdidas prematuras de fluido.
Para facilitar la instalación, el labio del retén deberá ser lubricado con grasa, aceite o con el fluido a retener.
La lubricación del labio además permitirá que el mismo no se desgaste de manera prematura por la fricción inicial del eje.
Coloque una protección sobre el eje si en este existen chaveteros o marcas por donde deba pasar el retén. Una cinta o vaina puede ser de gran utilidad.
No coloque ningún tipo de adhesivo sobre el diámetro exterior ya que este puede dañar el material del retén.
Dentro de lo posible se recomienda el uso de una herramienta de instalación.
El uso de herramientas evitan daños sobre el retén (deformaciones), sobre los alojamiento y además impiden la instalación desalineada de las piezas.
La figura 7 describe métodos correctos e incorrectos de instalación DBH sugiere que al momento de instalar las piezas se verifiquen las condiciones del eje, del alojamiento y se procure contar con las herramientas adecuadas. |
 |
 |
|
